Joel Horn, de 13 años y residente de a localidad austriaca de Valden, llevaba meses sufriendo humillaciones y ataques a través del Facebook. Sus acosadores colgaron en la red social una imagen de porno gay con su cara añadida digitalmente.Tras ver la imagen con la que sus hostigadores le “acusaban” de homosexual, el joven no pudo resistir más y se lanzó a las vías del tren. “Joel estaba deprimido y a menudo lloraba. Le acosaban en la escuela y a través de Facebook”, cuenta su madre.
Según los especialistas, el acoso escolar o “bullying” es cualquier forma de maltrato psicológico, verbal o físico producido entre escolares de forma reiterada a lo largo de un tiempo determinado. Las víctimas suelen ser niños y niñas preadolescentes o en la primera adolescencia y el porcentaje de niñas es ligeramente superior.
En un estudio del Instituto Catalán de Estudios de Violencia que data de 2009 centrado en el “bullying” homófobo se reveló que un 34% de los jóvenes LGBT que sufren insultos o agresiones por su orientación sexual no se lo cuentan a nadie mientras que el 20% que se decide a hacerlo, se lo cuenta en primer lugar a algún amigo íntimo antes que a sus padres. La falta de referentes, la homofobia interna y externa del entorno familiar más cercano y la falta de confianza son las principales causas de que estos adolescentes sufran su situación en silencio.
El caso de Joel vuelve a traer a la palestra otros tan recientes como el Holly Stuckey, una joven de 12 años del norte de Gales, que falleció el pasado mes de octubre en brazos de su padre por causas desconocidas tras haber sido sometida a un largo y tormentoso hostigamiento por parte de sus compañeros que la acusaban de lesbiana. También de Reino Unido, en este caso de Birmingham era Tom Mullaney, un muchacho de 15 años que también puso fin a su vida ahorcándose debido a la persecución que sufría por parte de sus acosadores por considerarle homosexual.
Fuente: noticias.universogay.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario